Entradas

Mostrando entradas de enero 15, 2014

Un relato de Gavrí Akhenazi

La señora Nmunguê Había leído acerca de la señora Nmunguê en los escritos del Comandante e inmediatamente había sentido una necesidad alterada por conocerla en persona y no a través de aquellas percepciones con las que en la letra se moldeaba el retrato. Todas las tardes pensaba en “la mujer de caderas robustas como mesas con pan”, que albergaba en su casa a niños soldado rescatados, porque así ella había perdido a sus hijos propios: como niños soldado muertos. Ahora, todos los niños soldado que manos diversas quitaban al infierno, eran sus hijos “y esta ancha matriarca poderosa que sonríe como ese hada madrina que precisa todo cuento triste, está aquí para devolver vida a tanto corazón de pájaro aturdido”. A Paloma las descripciones del Comandante sobre el entorno en que se movían le parecían un mapa.  Ella, entonces, las usaba como brújula para no perderse y saber qué decir a cada uno como si fueran una guía práctica de ese alrededor caluroso y ceñido q